Queque de Durazno

Este queque de durazno es una preparación exquisita, digna de la atención y elogios de todos quienes se animen a probarlo. Tan sólo imaginar la combinación entre esta fruta tan exótica y el sabor tradicional de un pastel esponjoso y tentador, reafirma a la pastelería como un arte que hace feliz a cualquiera que se involucre en ella. 

A continuación, aprenderás a preparar un exquisito queque de durazno (también llamado melocotón o peach en inglés), con crema. 

Ingredientes

• Medio kilo de harina leudante, cernida, más un poco para enharinar.
• Medio kilo de azúcar refinado.
• Un cuarto de kilo de mantequilla, más un poco para engrasar.
• Una taza de leche.
• Cinco huevos.
• Una cucharada de esencia de vainilla.

Para el relleno:

• Un frasco de duraznos en almíbar.
• Un frasco de mermelada de durazno.
• Medio litro de crema de leche para batir.
• Una taza de azúcar pulverizado.
• Media taza de licor de naranja.
• Una cucharadita de esencia de vainilla.

¿Cómo preparar un queque de durazno?

1. Paso 1: Precalentar el horno a 350°F/180°C. Colocar un bowl en el congelador. Engrasar y enharinar un molde de 25 centímetros de diámetro aproximadamente. En otro recipiente grande, batir la mantequilla hasta que quede como crema. Seguidamente, agregar el azúcar, poco a poco sin dejar de batir con movimientos envolventes. Esto permitirá que la mezcla absorba aire y la torta tenga una consistencia esponjosa. 
2. Paso 2: Agregar los huevos, uno por uno, batiendo muy bien entre cada adición. A continuación, incorporar la harina de trigo cernida, poco a poco, seguido de la esencia de vainilla, batiendo sólo lo suficiente para integrar todo. Si la mezcla queda muy gruesa y dura, puede agregarse la leche para que obtenga una consistencia más suave y fluida. 
3. Paso 3: Verter la mezcla dentro del molde preparado. Hornear durante cuarenta minutos aproximadamente, o hasta que al introducir un palillo de madera en el centro, éste salga limpio. Desmoldar sobre una rejilla metálica y dejar reposar.
4. Paso 4: Mientras reposa el pastel, preparar el relleno. Para ello, cortar los duraznos por la mitad y reservar. En el bowl que se guardó en el congelador, batir la crema de leche hasta que duplique su tamaño, mientras se añade poco a poco el azúcar y la esencia de vainilla. 
5. Paso 5: Cortar horizontalmente el queque en dos partes. Barnizar con licor de naranja la primera mitad, cubrir con una capa de mermelada y una capa de crema batida. Luego, distribuir una parte de los duraznos. Colocar encima la otra mitad, bañando con licor de naranja y cubriendo con una capa uniforme de mermelada. Disponer la otra parte de duraznos en el centro. Finalmente, con ayuda de una manga pastelera, decorar los bordes del pastel para lograr un efecto decorativo y profesional.

Este delicioso queque de durazno será el protagonista de cualquier evento especial.